domingo, 22 de noviembre de 2015

Reciclando faldas:

Con el paso de los años he subido de peso. No me gusta que la ropa me quede muy ceñida.
De manera que he decidido reciclar ropa que tenía y adaptarla a nuevos modelos.
Es lo que he hecho con una falda, con tela de punto, y unos pantalones.
He tenido la suerte de que las dos prendas eran del mismo tono de color.
Las dos prendas, por separado no me servían, de modo que decidí ensanchar la falda, colocando en los laterales unos fuelles, con la tela de los pantalones.
El forro es nuevo, para que la falda no se adhiera a las piernas.
La cinturilla es también de tela de los pantalones.
Me ha quedado perfecta, supercómoda y muy ponible.




sábado, 21 de noviembre de 2015

Chaqueta de punto irlandés:

He decidido colgar aquí las labores que ido haciendo estos años, y que todavía las usan.
Esta chaqueta se la hice a mi hija hace unos años. Es una tres cuartos, para que abrigue bien.
Tejida con lana gorda, he usado motivos irlandeses. La combinación de trenzas u ochos, rombos con el interior en punto de garbanzo.
Las mangas, sentadas, no se nota la unión.
De lo que estoy más orgullosa es del cuello. Está perfecto y llama la atención cuando la lleva puesta.
      

La única recomendación que tengo que hacer es que no se guarde colgada en una percha, puesto que se deforman los hombros.
Yo la guardo, plegada por la mitad, en la balda de un armario.









viernes, 20 de noviembre de 2015

Un mantel pintado:




Últimamente se han puesto de moda las técnicas de estampado en tela.
Es una técnica sencilla. Basta con elegir un diseño, dibujarlo en un papel. Luego se recorta, para, posteriormente, con un pincelito fino, rellenar los espacios vaciados.
Se va colocando en distintos lugares y así se va elaborando la greca. Aunque puede elegirse hacer solamente una esquina.
Navegando por internet he visto que también puede hacerse con el uso de un tampón, tallado en casa, incluso usando como base del sello, una patata.





jueves, 19 de noviembre de 2015

Un tapete de ganchillo:

Mi madre, en mi casa, tenía una cortina de ganchillo con un motivo de gallos, como ya he contado en otra entrada de este blog. Pica en el enlace si quieres verla.
Yo decidí tejer un tapete con los mismos motivos.
Me gusta tener algo que proteja la mesa del sol que entra por la ventana del salón.
El tapete es redondo. Lo empecé por el centro, y dividido en seis triángulos, cuyos lados es donde van los crecidos.
Aquí pongo una imagen, tomada más de cerca para que se aprecie más el detalle.

miércoles, 18 de noviembre de 2015

Un mantel combinado


Siempre me gusta aprovechar retazos de tela sobrante de otras labores.
Este mantel lo he hecho con trozos cuadrados de esterilla, unidos entre sí con el entredós de ganchillo.
El hilo utilizado ha sido de color beige. El dibujo elegido una greca sencilla, geométrica, con medallones simétricos.
Unir las dos partes ha sido hecho con un festón bordado a máquina.
Así he realizado dos de mis aficiones favoritas: tejer a ganchillo y coser.
Me gusta que las labores tengan alguna utilidad, no la sola de entretener. 
Puede ser utilizado como mantel, o como tapete para cubrir la mesa.

martes, 17 de noviembre de 2015

Un canesú de ganchillo:

A veces, encuentro retales de tela y enseguida me entran ganas de hacer algo.
Esto es lo que he hecho yo, tejer a ganchillo el canesú  y las mangas de este camisón.
Los dibujos son motivos florales.
Y las mangas están terminadas con un punto de piquillo.
La combinación de tela y ganchillo queda muy bonita, además es cómodo y de fácil lavada.
Las uniones de la labor de ganchillo con la tela las he hecho con un bordado a máquina.
Y para rematar el escote he metido un cordoncito de seda, del mismo color rosa.

lunes, 16 de noviembre de 2015

Otra labor antigua:

A mitad del siglo pasado, era costumbre entre las chicas solteras, 'hacerse el ajuar'.
Es decir, prepararse toda la ropa que iba a necesitar para su nuevo hogar cuando se casase.
Esa tarea duraba años.
Yo, por aquel entonces era profesora de corte y confección, además de coser para la calle los encargos que me hacían.
Cuando tenía menos trabajo, aprovechaba para hacerme mi ajuar.
A él pertece el camisón, y este peinador, una prenda que actualmente, quizás ni se conozca.
Pero yo me animo a ponerlo aquí. Hay que tener memoria.
El bordado a máquina me lo enseñó la señora Vivina, que vivía enfrente de mi tía Serafina, en la carretera.
El peinador está bordado, a máquina, en rosa, con un festón. Y le puse como motivo decorativo, con tela recortada, unas palomicas y mi nombre:

domingo, 15 de noviembre de 2015

Un bolso con historia...

Organizando armarios me ha salido este bolso que tenía guardado desde hace muchísimos años.
Fue primera labor grande
A principios de los años cuarenta.
Hacia el año 1941 o 1942 vinieron a Villaspesa un matrimonio: Pilar y Eduardo.
Eran recién casados y llegaron al barrio porque el hombre era enlosador, y venía a embaldosar el sanatorio del Pinar.
Pilar había trabajado en una fabrica de hilos, en Valencia.
Ella me regaló los hilos y el cañamazo y me enseñó a hacer el bolso.
Así aprendí el punto de cruz y a forrarlo por dentro.

Así que esta labor tiene, actualmente, en el 2015, unos 74 años.
Esta señora también me dirigió, posteriormente, un guardacamisones, que se colgaba en el armario.
A pesar de haber pasado tanto tiempo, todavía recuerdo a aquellas personas con cariño.