martes, 29 de diciembre de 2015

Un gorro como un turbante:

Este gorro-turbante lo he encontrado buscando complementos en internet.
He hecho de varios colores: verde, morado, marrón... pero siempre con el mismo modelo.
Es fácil de hacer.
Consiste en tejer una banda de diez cm de ancha, y 107 de larga, con agujas del nº 3, porque la lana no es muy gruesa.
El punto es uno de cara y otro de revés...Así hasta terminar.
Después se mide la cabeza de la persona, con una cinta.
Para montar el gorro-turbante así queda por detrás:
He puesto una lana de otro color para que se pueda apreciar el montaje, pero para coserlo debe hacerse con lana del mismo color y punto escondido, para que no se note la costura.

Así queda por delante:
   
Ya terminado queda así.   

Una vez cosido, se puede decorar. Yo he montado un broche, sobre una base de metal, con cuentas que tenía en casa:

domingo, 27 de diciembre de 2015

Gorros para el frío:

Con el éxito que han tenido las bandas, he decidido dedicarme a tejer más complementos.
Aquí traigo gorros de lana, con la punta algo caída hacia la nuca.

He montado unos 100 puntos.
He tejido 13 cm de goma: dos puntos de cara, dos puntos de revés.
Luego he empezado los ochos:
Ocho puntos del revés, y 6 puntos para cada ocho.
Montando el ocho, cada ocho pasadas.
Desde la goma he hecho 19 cm de tejido, y luego he ido menguando cada diez puntos.
Los siguientes menguados, cada ocho pasadas.
Después, cada cuatro pasadas, luego cada tres pasadas...para que vaya disminuyendo hacia la punta. Siempre menguando en el mismo sitio, en el centro de las pasadas del revés.
Después lo he cosido con el punto escondido, para que no se note la costura.
Quedan muy majos, pudiéndose doblar la goma, o dejarla estirada, para que caiga más hacia la parte de atrás de la cabeza.

lunes, 21 de diciembre de 2015

Regalos prácticos:

El refrán dice: "De Todos Santos a Navidad es invierno de verdad".
Aunque este año parece que el clima es benigno y nos proporciona un otoño cálido y los escasos días que llevamos de invierno también son templados, no está de más prepararnos para las temperaturas frías que seguro que vendrán.



Así que mis regalos de Navidad para las chicas va a consistir en bandas y gorros para el pelo.

He elegido lanas de diferentes colores, pero todas de lanas Katia.
De la serie Alaska y Fama.
Acrílicas para que no piquen...
Con agujas del 3 o 3 y 1/2, como recomiendan en la etiqueta.

La banda granate está hecha, en la primera vuelta con tres puntos del revés; el punto de la cara no se hace, se pasa a la aguja derecha, se echa el hilo por detrás, y se siguen haciendo otros tres puntos del revés...Así sucesivamente.
En la segunda vuelta, se hacen los puntos correspondientes del revés y el de la cara saldrá largo.
Luego se une la banda, y se teje otra banda más pequeña, que es la que se coloca encima, recogiendo, como si fuese un lazo.

La banda azul se teje una parte recta, y después se separa en dos partes, con el mismo número de puntos en cada lado, y se teje independientemente.
Luego se cruzan los dos, y se unen, quedando como si fuese un ocho. 


Esta banda se teje empezando con 5 puntos. Se crece un punto a cada lado, dejando uno en el centro, cada tres pasadas. 
En la otra parte se disminuye de igual manera,
Esta banda se une con botones.
Para terminar la labor, se teje a ganchillo, la flor, que yo la he hecho con el mismo color de lana. Para rematarla he hecho un punto de cangrejo.









domingo, 20 de diciembre de 2015

Regalos para Navidad:

En estas fechas siempre se tienen detalles con los nuestros, con nuestra familia.
Cada año hay que buscar con qué sorprender. Para ello casi siempre cuento con mi creatividad y con la complicidad de mi hija.
¿Y qué os parece este? He personalizado las tazas, así cada uno reconocerá la suya.
He necesitado algodón de colores, un ganchillo del número 0, botones, y, por supuesto, las tazas.
Yo las he comprado blancas, para que combinasen con los hilos que ya tenía.
Primero he buscado un diseño que me gustase, de las muchas revistas que he coleccionado a lo largo de mi vida.
He hecho una tira de unas 60 cadenetas, y he utilizado puntos altos.


Una vez tejidas las bandas, se aseguran los hilos de los empieces y de las terminaciones. 
Se cosen los botones, yo he elegido alguno de fantasía.












Y ¡este ha sido el resultado final!








domingo, 22 de noviembre de 2015

Reciclando faldas:

Con el paso de los años he subido de peso. No me gusta que la ropa me quede muy ceñida.
De manera que he decidido reciclar ropa que tenía y adaptarla a nuevos modelos.
Es lo que he hecho con una falda, con tela de punto, y unos pantalones.
He tenido la suerte de que las dos prendas eran del mismo tono de color.
Las dos prendas, por separado no me servían, de modo que decidí ensanchar la falda, colocando en los laterales unos fuelles, con la tela de los pantalones.
El forro es nuevo, para que la falda no se adhiera a las piernas.
La cinturilla es también de tela de los pantalones.
Me ha quedado perfecta, supercómoda y muy ponible.




sábado, 21 de noviembre de 2015

Chaqueta de punto irlandés:

He decidido colgar aquí las labores que ido haciendo estos años, y que todavía las usan.
Esta chaqueta se la hice a mi hija hace unos años. Es una tres cuartos, para que abrigue bien.
Tejida con lana gorda, he usado motivos irlandeses. La combinación de trenzas u ochos, rombos con el interior en punto de garbanzo.
Las mangas, sentadas, no se nota la unión.
De lo que estoy más orgullosa es del cuello. Está perfecto y llama la atención cuando la lleva puesta.
      

La única recomendación que tengo que hacer es que no se guarde colgada en una percha, puesto que se deforman los hombros.
Yo la guardo, plegada por la mitad, en la balda de un armario.









viernes, 20 de noviembre de 2015

Un mantel pintado:




Últimamente se han puesto de moda las técnicas de estampado en tela.
Es una técnica sencilla. Basta con elegir un diseño, dibujarlo en un papel. Luego se recorta, para, posteriormente, con un pincelito fino, rellenar los espacios vaciados.
Se va colocando en distintos lugares y así se va elaborando la greca. Aunque puede elegirse hacer solamente una esquina.
Navegando por internet he visto que también puede hacerse con el uso de un tampón, tallado en casa, incluso usando como base del sello, una patata.





jueves, 19 de noviembre de 2015

Un tapete de ganchillo:

Mi madre, en mi casa, tenía una cortina de ganchillo con un motivo de gallos, como ya he contado en otra entrada de este blog. Pica en el enlace si quieres verla.
Yo decidí tejer un tapete con los mismos motivos.
Me gusta tener algo que proteja la mesa del sol que entra por la ventana del salón.
El tapete es redondo. Lo empecé por el centro, y dividido en seis triángulos, cuyos lados es donde van los crecidos.
Aquí pongo una imagen, tomada más de cerca para que se aprecie más el detalle.

miércoles, 18 de noviembre de 2015

Un mantel combinado


Siempre me gusta aprovechar retazos de tela sobrante de otras labores.
Este mantel lo he hecho con trozos cuadrados de esterilla, unidos entre sí con el entredós de ganchillo.
El hilo utilizado ha sido de color beige. El dibujo elegido una greca sencilla, geométrica, con medallones simétricos.
Unir las dos partes ha sido hecho con un festón bordado a máquina.
Así he realizado dos de mis aficiones favoritas: tejer a ganchillo y coser.
Me gusta que las labores tengan alguna utilidad, no la sola de entretener. 
Puede ser utilizado como mantel, o como tapete para cubrir la mesa.

martes, 17 de noviembre de 2015

Un canesú de ganchillo:

A veces, encuentro retales de tela y enseguida me entran ganas de hacer algo.
Esto es lo que he hecho yo, tejer a ganchillo el canesú  y las mangas de este camisón.
Los dibujos son motivos florales.
Y las mangas están terminadas con un punto de piquillo.
La combinación de tela y ganchillo queda muy bonita, además es cómodo y de fácil lavada.
Las uniones de la labor de ganchillo con la tela las he hecho con un bordado a máquina.
Y para rematar el escote he metido un cordoncito de seda, del mismo color rosa.

lunes, 16 de noviembre de 2015

Otra labor antigua:

A mitad del siglo pasado, era costumbre entre las chicas solteras, 'hacerse el ajuar'.
Es decir, prepararse toda la ropa que iba a necesitar para su nuevo hogar cuando se casase.
Esa tarea duraba años.
Yo, por aquel entonces era profesora de corte y confección, además de coser para la calle los encargos que me hacían.
Cuando tenía menos trabajo, aprovechaba para hacerme mi ajuar.
A él pertece el camisón, y este peinador, una prenda que actualmente, quizás ni se conozca.
Pero yo me animo a ponerlo aquí. Hay que tener memoria.
El bordado a máquina me lo enseñó la señora Vivina, que vivía enfrente de mi tía Serafina, en la carretera.
El peinador está bordado, a máquina, en rosa, con un festón. Y le puse como motivo decorativo, con tela recortada, unas palomicas y mi nombre:

domingo, 15 de noviembre de 2015

Un bolso con historia...

Organizando armarios me ha salido este bolso que tenía guardado desde hace muchísimos años.
Fue primera labor grande
A principios de los años cuarenta.
Hacia el año 1941 o 1942 vinieron a Villaspesa un matrimonio: Pilar y Eduardo.
Eran recién casados y llegaron al barrio porque el hombre era enlosador, y venía a embaldosar el sanatorio del Pinar.
Pilar había trabajado en una fabrica de hilos, en Valencia.
Ella me regaló los hilos y el cañamazo y me enseñó a hacer el bolso.
Así aprendí el punto de cruz y a forrarlo por dentro.

Así que esta labor tiene, actualmente, en el 2015, unos 74 años.
Esta señora también me dirigió, posteriormente, un guardacamisones, que se colgaba en el armario.
A pesar de haber pasado tanto tiempo, todavía recuerdo a aquellas personas con cariño.

jueves, 15 de octubre de 2015

Una manta colorida:

Esta manta es una de las muchas que mi hija ha hecho. Se la enseñó mi amiga y vecina Alicia, ya fallecida.
Está hecha con restos de lanas, sobrantes de otras labores; aunque, una vez metida en la labor, cuando veo un ovillo de color bonito no dudo en comprarlo.
El color que ha coordinado todos es el negro.
No es una tarea pesada, porque se hace cuadro a cuadro, y luego se unen entre sí.
El cuadro se comienza por cinco cadenetas, en lana negra. Y se cierran.

Luego se hace otra vuelta del mismo color, esta a Punto Bajo: Se lleva una cadeneta sobre el gancho; se pincha, se coge hilo y los dos se cierran juntos.
Cuando se llega a la esquina, se hacen dos cadenetas para crecer, y se pincha en el mismo agujero que el anterior.
Cada dos pasadas se cambia el color.
El empalme de colores debe quedar oculto.
Para ello, en la última cadeneta de la pasada que se termina, se mete la lana de la siguiente y estirar, luego se trenzan las dos, enrollándolos. Se mete en la base, y se sigue tejiendo sobre ella, así queda oculto el remate.
Se hacen tantas franjas como se quiera. Estos cuadros tienen unas diez.
En la última pasada de negro, cuando ya se va a cerrar el cuadro, se deja un poco de lana, cerrando la labor, porque luego ese trozo servirá para unir parte de los cuadros que construye la manta.
Tiene varias posibilidades: puede ser manta calentita y ligera para las tardes de sofá, o puede ser una colcha, cubrecama, animando una habitación de dormir.

sábado, 26 de septiembre de 2015

Una colcha de lana

Cuando baja la temperatura rescatamos del fondo de los armarios las mantas de lana.
Algunas son tan bonitas que las tengo de colcha o cubrecama.
Me gusta porque son ligeras, no pesan, y abrigan para los primeros días otoñales.
Esta la he hecho a ganchillo, en diferentes tonos que van del beige al marrón.
Su realización no es pesada, porque se van haciendo cuadros, diferentes, y luego se combinan para que queden como un patchwork.
Unos los he hecho con franjas más o menos estrechas, y otros en un sólo color, que sirve para unificar la composición.
Para terminar la labor los he unido con el ganchillo, empleando un punto raso.